Cole clasificó el impulso para pinchar a mujeres y niños, lo que considera irresponsable, como «actos criminales que se perpetran contra la humanidad».
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Un patólogo estadounidense dice que los posibles efectos secundarios de la inyección de COVID eran como una “bomba nuclear”, debido a la tecnología de “plataforma de nanopartículas lipídicas” que “nunca se había probado antes”.
El Dr. Ryan Cole se sentó con Bright Light News durante la Conferencia Better Way del Consejo Mundial para la Salud el 4 de junio y brindó su opinión médica sobre los peligros que ha presenciado a raíz del lanzamiento de la vacuna contra el COVID.
“Todo el mundo oye hablar de la miocarditis”, dijo. “Lo que no escuchan es que una nanopartícula lipídica más una secuencia genética modificada es una bomba nuclear”.
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“No es solo que esta inyección de COVID sea peligrosa para las personas, es esta plataforma de nanopartículas lipídicas más secuencia genética que nunca antes se había probado”.
Cole comparó la plataforma de nanopartículas de lípidos con «el ajo, una vez que lo pones en el brazo, va a cualquier parte del cuerpo». Por eso, “puede dañar el cerebro”, añadió.
Según Cole, las nanopartículas de lípidos “fueron diseñadas originalmente para llevar quimioterapia o posibles agentes genéticos al cerebro”.
«¿Dónde no quieres que una toxina se replique?» preguntó. «En tu cerebro».
Cole dijo que esto ha llevado a una «supresión inmunológica», que según él se evidencia por un aumento en las «tasas de cáncer debido a esa supresión inmunológica».
“Estamos viendo muertes por esta inyección a un ritmo más alto que cualquier producto médico que se haya usado antes en la humanidad”, afirmó. Llamó al lanzamiento de la vacuna COVID “el experimento más grande jamás realizado por la humanidad, sin saber los resultados a largo plazo”.
De particular preocupación para Cole es el mecanismo de proteína de punta de las inyecciones de ARNm, que se ha relacionado con coágulos de sangre, daño cardíaco y cerebral y riesgos potenciales para los bebés lactantes y la fertilidad.
Cole también afirmó que el pinchazo se está utilizando “para un virus que ya no existe”. Con eso se refería al virus “Wuhan”, la supuesta variante original de COVID.
“Wuhan se ha ido; Omicron está aquí”, dijo. “Las inyecciones ahora son todo riesgo, ningún beneficio”.
Además, dijo, “las vacunas… contra el coronavirus nunca funcionaron”.
Cole está preocupado por el «daño permanente de órganos en las personas» inducido por la vacuna. También le preocupan los daños que el disparo podría causar en los niños y la fertilidad de las mujeres.
“Los niños se están poniendo esta aguja con este gen en el brazo…”, dijo Cole.
“Toma equivocada, proteína equivocada, virus equivocado…”, continuó.
“Ni siquiera sabemos dónde aterrizará, [pero] sí sabemos que va a sus ovarios”.
“Nunca fue seguro durante el embarazo”, agregó. “Nunca usas una modalidad de terapia experimental en mujeres hasta que se demuestre que es segura”.
“Estas [vacunas] nunca fueron seguras durante el embarazo, y nunca lo serán”.
Cole clasificó el impulso para pinchar a mujeres y niños, lo que considera irresponsable, como «actos criminales que se perpetran contra la humanidad».
