Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos admiten que dieron información falsa sobre la vigilancia de la vacuna COVID-19, incluida la afirmación inexacta de que realizó un cierto tipo de análisis más de un año antes de que realmente lo hiciera.
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La información falsa se transmitió en respuesta a las solicitudes de la Ley de Libertad de Información (FOIA) para los resultados de la vigilancia, y después de que los CDC afirmaron que las vacunas COVID-19 están siendo monitoreadas «por los esfuerzos de monitoreo de seguridad más intensos en la historia de los Estados Unidos».
«Los CDC han revisado varias solicitudes de FOIA y, como resultado de su revisión, los CDC están emitiendo correcciones para la siguiente información», dijo una portavoz de los CDC a La Gran Época en un correo electrónico.
Ningún empleado de los CDC proporcionó intencionalmente información falsa y ninguna de las respuestas falsas se dio para evitar los requisitos de informes de foia, dijo la portavoz.
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Inflamación del corazón
La Gran Época en julio presentó una FOIA, o una solicitud de información no pública, a los CDC para todos los informes de un equipo que se formó para estudiar la inflamación cardíaca posterior a la vacunación mediante el análisis de informes presentados al Sistema de Informes de Eventos Adversos de Vacunas (VAERS), un sistema administrado por los CDC y la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos.
Los CDC no solo dijeron que el equipo no realizó ninguna abstracción o informe hasta octubre de 2021, sino que «no se conocía una asociación entre la miocarditis y la vacunación de ARNm contra el COVID-19 en ese momento».
Esa afirmación era falsa.
Los ensayos clínicos de las vacunas COVID-19 de Pfizer y Moderna no detectaron ni miocarditis ni pericarditis, dos tipos de inflamación cardíaca. Pero para abril de 2021, el ejército de los Estados Unidos estaba dando la alarma sobre la inflamación cardíaca posterior a la vacunación, y para junio de 2021, los CDC estaban reconociendo públicamente un vínculo.
Los CDC corrigieron previamente la declaración falsa, pero no dijeron si sus equipos alguna vez habían analizado los informes de VAERS.
«En referencia a la abstracción de la miocarditis de los informes de VAERS, este proceso comenzó en mayo de 2021 y continúa hasta la fecha», dijo la portavoz de los CDC en un correo electrónico.
Los CDC aún no han publicado los resultados de los análisis.
Minería de datos
Los CDC prometieron en enero de 2021 que realizarían un tipo específico de análisis de minería de datos en los informes VAERS llamado Ratio de informes proporcionales (PRR). Pero cuando Children’s Health Defense, una organización sin fines de lucro, solicitó los resultados, los CDC dijeron que «los CDC no realizaron PRR» y que la minería de datos «está fuera del alcance de la agencia».
Cuando se le pidió una aclaración, el Dr. John Su, quien encabeza el equipo VAERS de los CDC, dijo a La Gran Época en un correo electrónico que los CDC comenzaron a realizar PRR en febrero de 2021, «y continúan haciéndolo hasta la fecha».
El CDC ahora dice que tanto la respuesta original como la declaración de Su eran falsas.
La agencia no comenzó a realizar PRR hasta el 25 de marzo de 2022, dijo la portavoz de los CDC. La agencia dejó de realizarlos el 31 de julio de 2022.
La portavoz dijo que «malinterpretó» tanto a Children’s Health Defense como a La Gran Época.
Children’s Health Defense había solicitado los PRR que los CDC habían realizado desde el 1 de febrero de 2021 hasta el 30 de septiembre de 2021. La Gran Época preguntó si la respuesta a la solicitud era correcta.
La portavoz dijo que los CDC pensaban que la «minería de datos» se refería solo a la minería de datos bayesiana empírica (EB), un tipo diferente de análisis que la Administración de Alimentos y Medicamentos ha prometido realizar en los datos de VAERS.
«La idea de que los CDC no se dieron cuenta de que estábamos preguntando sobre los PRR, sino solo sobre la minería de datos en general, simplemente no es creíble, ya que nuestra solicitud de FOIA mencionó específicamente los PRR y su respuesta también mencionó que no hicieron PRR. No dijeron ‘minería de datos en general'», dijo Josh Guetzkow, profesor titular de la Universidad Hebrea de Jerusalén que ha estado trabajando con Children’s Health Defense, a La Gran Época por correo electrónico.
«Tampoco hay una razón creíble por la que esperaron hasta el 31 de marzo de 2022 para calcular los PRR, a menos que fuera en respuesta a nuestra FOIA inicial presentada en diciembre de 2021, que fue rechazada el 31 de marzo de 2022, el mismo día en que dicen que comenzaron sus cálculos. Significa que los CDC no analizaron VAERS para detectar señales de seguridad de alerta temprana durante más de un año después de que comenzara la campaña de vacunación, lo que aún cuenta como un fracaso significativo», agregó.
Los CDC tampoco han publicado los resultados de los PRR. «Los resultados de PRR fueron generalmente consistentes con la minería de datos de EB, revelando que no hay señales de seguridad inesperadas adicionales. Dado que es una técnica de minería de datos más robusta, los CDC continuarán confiando en la minería de datos de EB en este momento», dijo la portavoz de la agencia.
La FDA le ha dicho a La Gran Época que realizó la minería de datos de EB, pero la agencia se ha negado a compartir los resultados.
