Con los funcionarios de salud del condado de Los Ángeles anunciando el mes pasado que las mascarillas ya no serán obligatorias en interiores, apareció una carta firmada por médicos e investigadores del USC y UCLA que sugiere que los mandatos de mascarillas fueron ineficaces para prevenir la propagación de COVID-19 en el condado.
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La carta de febrero de investigadores y profesionales médicos de la Escuela de Medicina Geffen de UCLA y la Escuela de Medicina Keck de USC fue enviada a la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles pidiéndole a la junta que ponga fin a los mandatos de máscaras.
«El momento de poner fin a los mandatos locales de máscaras es ahora», se lee en la carta.
Los datos que se muestran en la carta sugieren que hubo un aumento continuo en los casos de COVID-19 en los últimos 7 meses de 2021, a pesar de que los mandatos de máscaras estaban vigentes durante ese tiempo.
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La carta hace referencia además a varios estudios, uno en Dinamarca y otro en Bangladesh, que muestran que no hubo impactos significativos en los casos de COVID-19 entre los grupos enmascarados y desenmascarados.
El diputado de salud Anders Corey de la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles dijo a The Epoch Times que la carta de los médicos influyó en la supervisora Kathryn Barger y su decisión de oponerse abiertamente a los mandatos de máscaras.
Barger publicó una carta abierta (pdf) el 25 de julio oponiéndose a los mandatos de máscaras en el condado, solo unos días antes de que el Departamento de Salud Pública del condado anunciara que no haría cumplir un mandato universal de máscaras en interiores debido a la desaceleración de la transmisión de COVID-19 en todo el condado.
«No he visto ningún dato empírico que demuestre de manera concluyente que los mandatos de enmascaramiento hagan una diferencia en la disminución o detención de las tasas de transmisión de COVID-19», escribió Barger.
En su carta, hizo referencia al análisis de la efectividad del mandato de máscaras en el condado de Alameda, que abandonó sus políticas solo tres semanas después de implementarlas, citando que no hay impactos significativos en el condado en comparación con los condados locales sin políticas de enmascaramiento.
«Lo que he visto, una y otra vez, es que los mandatos de enmascaramiento en realidad distraen nuestros esfuerzos colectivos para disminuir las tasas de infección por COVID-19», escribió Barger.
Desde enero, Barger ha afirmado que los mandatos de máscaras no funcionan porque no se cumplen ni se aplican.
«A las personas se les debe permitir tomar una decisión informada sobre si enmascararse o no», dijo en un comunicado.
El Departamento de Salud de Los Ángeles ha seguido recomendando el uso de mascarillas en lugares públicos de todo el condado, como escuelas, transporte público, entornos de atención médica, actividades en interiores, aviones y en cualquier lugar con grandes multitudes.
